Existen varios “gatillos” que activan una venta, entreellos, decisiones personales delos dueños como necesitar un cambio después de muchos años, trascendencia de la familia en la organización, el simple cansancio de los socios y/o el crecimiento más allá de las políticas locales bancarias, entre otras. Esta última es muy común cuando las oportunidades comienzan a crecer,los negocios están a la vista y, de pronto,viene la clásica pregunta: ¿de dónde sacamos los recursos para este negocio?
Mientras la empresa crece como pyme, accede a financiamiento de pymes. “Es simple,creamos esta estructura blindada coninteligencia financiera. Sin embargo, cuando comenzamos a acceder a nuevas ligas de negocios, viene la angustia de tener las capacidades y no tener acceso a apoyo financiero; ahí surgen instrumentos privados y entre ellos está la opción de la venta o fusión de la empresa”, apunta el CEO de Fénix.
Cada empresa tiene su etapa para crecer, consolidarse eventualmente transformarsemediante su venta. Hay que evaluar la etapa, su madurez y construirla si es necesario.
Mediante el proceso deventa o fusión de la empresa, los dueños o accionistas pueden lograr el sueño de hacer crecer y obtener una merecida riqueza patrimonial, que cumpla con sus expectativas de años de logrado esfuerzo personal y familia